La semana pasada, una delegación de nuestra Institución integrada por el Presidente Carlos Allende, el Vicepresidente Santiago Pano, el Secretario Hernán Ferretti y la Tesorera Eugenia Diez estuvo en la ciudad de La Plata por invitación del nuevo Comité Ejecutivo del Colegio de Escribanos de la Provincia de Buenos Aires que desde el 1° de febrero preside el notario Diego Molina.
En calidad de anfitriones, también estuvieron la Vicepresidente 1° del Colegio de Escribanos bonaerense, Alicia Broccardo; la Vicepresidente 2°, Nelly López; el Secretario de Gobierno y Administración, Guillermo Longhi; la Secretaria Académica, Karina Salierno; el Tesorero, Fernando de Salas; y el Protesorero, Rubén Stradiot.
En el encuentro -que sirvió de presentación de las nuevas autoridades bonaerenses- se compartieron las miradas de los dos principales notariados y se generaron puntos de trabajo en común para redoblar el esfuerzo en generar nuevas herramientas tecnológicas que beneficien a la sociedad y acompañen la tarea del notario.
Tras la reunión, nuestro Presidente Carlos Allende valoró que “fue una reunión para consolidar las relaciones entre los dos Colegios y diagramar una agenda activa desde ahora en adelante, que retoma los preceptos de los convenios de cooperación firmados en 2019 en materia de tecnología”. Allende resaltó “el muy buen clima generado” y confió “en poder trabajar conjuntamente”.
Por su parte, Molina también resaltó la necesidad de “la modernización tecnológica para hacer frente a las nuevas demandas y desafíos, siempre teniendo en cuenta el resguardo de la seguridad jurídica, que es esencia de la función, así como la vinculación con diferentes organismos”.
“Fue una reunión para consolidar las relaciones entre los dos Colegios y diagramar una agenda activa desde ahora en adelante, que retoma los preceptos de los convenios de cooperación firmados en 2019”
“Tenemos la necesidad de modernización tecnológica para hacer frente a las nuevas demandas y desafíos, siempre teniendo en cuenta el resguardo de la seguridad jurídica, que es esencia de la función”
Acceso a la titularidad de un registro
Los beneficios adicionales del curso de 120 horas como sustitutivo del examen
Desde el año 2012 el denominado “Curso de 120 horas”, -que a raíz de la modificación de la ley 404 se ofrece a adscriptos en el Ciclo de Perfeccionamiento Profesional del Colegio para acceso a la titularidad de un registro-, ha formado más de 500 escribanos que se convirtieron, más tarde, en titulares.
El ciclo, que se divide en 4 módulos de 30 horas cada uno, “busca tener un canal de comunicación abierto con los cursantes”, definió el escribano Teiltelbaum.
Por su parte, la escribana Lukaszewicz recordó que “es de formato taller, donde se busca intercambiar ideas y jurisprudencia y se completa con una escritura final y/o un dictamen”. La coordinadora también adelantó que este año se desarrollará en forma virtual, modalidad que ya se ha instalado en la educación superior.
Nicolás Liporace es uno de los aspirantes a convertirse en titular de un registro luego de completar este curso. “Quiero seguir aprendiendo y consolidando conocimiento, y sé que mediante este formato se da en un marco de cooperación entre todos”.
El Archivo y la atención en pandemia
Hace menos de 3 años las salas de estudios de títulos saturaban de personas consultando escrituras. Hoy, con crisis inmobiliaria y pandemia mediante, el Archivo de Protocolos tuvo que afrontar un nuevo esquema de atención por la incidencia que tiene el papel en la transmisión del virus y para evitar aglutinamientos de consultas en espacios físicos cerrados.
Para el Director del Archivo, Esc. Roberto Mignolo, “se buscó reeducar en lo laboral y en los servicios que se presta, con más comunicación electrónica”. En esa línea, la Esc. Sandra Canel –quien estudia asiduamente títulos- destacó que “se logró un mecanismo muy bueno en el que podemos trabajar con distancia con turnos de 2 horas que se solicitan previamente”.
Desde hace menos de una década, los archivos de Alsina se complementan con los de la sede de Chorroarín. Respecto a este punto, la Subdirectora, Esc. Angélica Suárez, remarcó que las solicitudes de los Tomos que se encuentran en Chorroarín son muy específicos. “Allí están los Protocolos de 1901 a 1973 y para analizar la documentación de las personas que lo piden hay que realizar un estudio muy minucioso de los antecedentes”.
detalló cómo se articuló con el Departamento de Inspección de Protocolos para que el Área de Incautación desarrollara una estrategia con los inspectores para que trabajasen en el edificio de Balvanera. Las precauciones en las escribanías para recibir personas externas fue determinante para que Alsina recibiera a los agentes de Inspección.
Protocolos para Protocolos
El arte de encuadernar
El Taller de Encuadernación de la sede de Alsina recibió a Entre Líneas y nos mostró el proceso de recepción de libros de requerimientos y los protocolos de los escribanos para su posterior encuadernación, en los casos de renuncias, fallecimientos y jubilaciones, para aquellos escribanos que, por algún motivo especial, no lo hayan cumplido.
Juvenal trabaja desde 2008 y define que su rol es “desarmar el Tomo, coserlo, encolarlo y lijarlo”. En el video nos explicó cómo fue el proceso de aprender un saber que desafía a los tiempos de la digitalización y que requiere de un cuidadoso trabajo.
“La encuadernación es fundamental: cuando el escribano entrega su Protocolo en nuestra sede, traslada su custodia y conservación”, sintetizó la escribana Angélica Suárez, Subdirectora del Archivo.
